Federico Jiménez Losantos comienza a devorar al PP

Lo que hace un tiempo era meros tirones de orejas o recomendaciones más o menos severas a los dirigentes populares en sus peroratas matutinas, se ha convertido en un enfrentamiento directo con algunos pesos pesados de la derecha española tras los últimos resultados en las recientes elecciones catalanas que él considerá una verdadera debacle.

Federico Jiménez Losantos es un personaje que ya no me sorprende. Es más. Diga lo que diga cada mañana, me deja casi igual.

Ya estoy curado de espanto y me conozco casi al dedillo sus monólogos, de modo que tiene que decir algo realmente novedoso para que me inmute. De hecho ya no lo sigo tan a menudo. Era un gran humorista. Un humorista brillante, pero no renueva su repertorio ni sus metáforas ni sus triples saltos mortales con tirabuzón dialécticos.

Con la deriva centrista o maricomplejinista, como él mismo diría, de algunos dirigentes del PP, su gozo ha caído en un pozo y lo que pensaba que podía convertirse en una derecha combativa, día a día en manifestaciones en la calle y dando caña continuamente a ZP y sus secuaces, se ha quedado en nada, según su parecer y es hora de dar una vuelta de tuerca a la situación.

Comenzó lanzando sus andanadas contra el alcalde de Madrid, siguió contra el dirigente del PP en Cataluña, Piqué y siguió con el de Andalucía, Arenas y empieza a distanciarse claramente de lo que muchos considerábamos su partido de cabecera.

Pero en las elecciones de Catalunya ha surgido otro partido, Ciudadanos, que cuenta con todas sus bendiciones y ha decidido apoyarlos directamente en detrimento del PP. Lo curioso del caso es que Ciudadanos es un partido que se nutre principalmente de personas de izquierda y Federico ahora mismo es más bien de derechas. Quizás suene raro, pero la política española es más bien un territorio friki.

Federico en su juventud militó en el ala maoista del Partido Comunista. Dicho de otro modo: a la izquierda de la izquierda de la izquierda. Mi teoría es que ahora quiere volver por sus fueros y quiere conseguir con la gente de derechas lo que en sus tiempos mozos hacía la izquierda: salir a la calle a manifestarse, protestar, ser combativos, estar en todos los fregaos, etc.

Sólo hay que oirlo para intuir que esa es la derecha que le gustaría. Todo el día en la calle y dando caña. La realidad es otra. La derecha, y no sólo en España, suele estar formada por personas acomodadas, con la vida más o menos resuelta y sin ganas de cambiar lo que ya está. De modo que sacar a la calle en plan hordas revolucionarias a este tipo de gente es pedir imposibles, pero es ese el empeño de Don Federico y creo que no cejará hasta conseguirlo.

Federico tiene su programa en la COPE cada mañana y legiones de seguidores siguen sus andanzas, sus interpretaciones y lo apoyan o lo recriminan a lo largo y ancho de Internet en foros, páginas, diarios digitales, etc. Una repercusión impresionante que ha hecho que algunos medios ya tengan secciones de Federico Jiménez Losantos como fijas.

Me hubiera encantado ilustrar este post con el cuadro de Goya, Neptuno devorando a sus hijos, pero no tengo ni idea con el Photoshop y ponerle a Neptuno la cara de Jiménez Losantos y a alguno de sus hijos la de Piqué o Gallardón me hubiera costado un mundo hacerlo, de modo que te dejaré con una imagen que encontré en el diario Avui.