El mundo del streaming de música cuenta con un nuevo protagonista, Tidal. Es la culminación de un proceso largo en el que se han involucrado una serie de músicos, autores e intérpretes del panorama discográfico que, capitaneados por Jay Z, han optado por crear un sistema propio para competir con otras plataformas similares que, bien la industria musical o los imperios de Internet han creado para ofrecer este tipo de servicios cada vez más demandados y utilizados por los usuarios.
Las principales armas para competir de Tidal son los videos de alta calidad HD, los contenidos editoriales propios y especializados y la gran baza, sonido lossless, esto es, sin pérdida, algo que se echaba en falta en muchos de estos portales.
Para que te puedas hacer una idea del salto cualitativo que va a suponer Tidal, sus competidores ofrecen el audio a una calidad máxima de 320 kbps y ellos se comprometen a lanzar la señal a 1411 kbps.
En principio, todo lo que aumente la calidad está genial, pero no sé si habrán tenido en cuenta que el ancho de banda necesario para que cualquiera pueda disfrutar online de ese sonido sin pérdida, requiere un ancho de banda considerable que actualmente sólo está disponible en algunos países y no en su totalidad.
Otro de los retos a los que deberá enfrentarse Tidal es la ausencia de accesos libres y/o gratuitos. para crear una masa crítica considerable.Todos son de pago y no sé si podrán conseguir un número de suscriptores que haga rentable el servicio. Pero eso nos lo dirá el tiempo.
Lo que si está claro es que la industria se enfrenta a una nueva rotura en su línea de flotación porque dejan de controlar una parte importante de su negocio. No sé si los desencuentros que han protagonizado intérpretes, industria y portales de streaming desde la incorporación de este servicio, invitan más a que cada uno vaya por su lado o a buscar un objetivo común. En cualquier caso la competencia en este ámbito está ofreciendo cada día mejores posibilidades para los usuarios y oyentes que hace tiempo que han optado por otra forma de acceder a la música, muchas veces al margen de la industria que, según veo, todavía se resiste al cambio.
Desde hace mucho tiempo tengo claro que los músicos deben ser recompensados justamente por su trabajo y desde aquí y desde Radio Esperantia, ponemos nuestro granito de arena en ello.
Espero poder probar el sistema pronto y ya te iré contando la experiencia. Hasta ese momento, le damos la bienvenida a un nuevo salto de calidad en el mundo de la música.
El logo de Tidal, lo encontré en su página oficial.
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