Poco más que añadir que felicicitar a Novak Djokovic y a Rafael Nadal por el extraordinario partido que nos han ofrecido durante 5 horas y 53 minutos. Un maratón de tenis que daba la impresión que nunca iba a acabar.
Los dos tenistas se han vaciado en la pista y uno de los dos tenía que ganar. En esta ocasión y al igual que el resto de finales durante el año 2011, Djokovic se ha impuesto a Nadal en cinco sets.
Daba algo de miedo pensar en el inmenso esfuerzo que se veía durante todo el partido de principio a fin. Desde luego, encuentros como éstos son los que crean afición. Felicidades a los dos.
La imagen la encontré en Australian Open.
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