Batasuna presenta nueva formación política que condena toda la violencia. La sociedad dividida por el anuncio

Sin duda la noticia del día en términos políticos es la presentación del nuevo partido que presenta en el País Vasco la izquierda abertzale. No he parado de leer los distintos enfoques que aparecen en todos los medios de comunicación de un signo y otro y no termino de estar seguro de nada.

Por un lado el hecho de que hayan decidido incluir en sus estatutos la condena a toda violencia, incluida la de ETA, es una excelente noticia y una toma de postura clara y contundente con respecto a sus anteriores postulados, siempre y cuando sean consecuentes con esta posición y la mantengan con el paso del tiempo.

No sirve de mucho ni para ellos ni para el resto que hagan el paripé durante los dos meses que quedan para las elecciones autonómicas y municipales y, una vez instalados de nuevo en las instituciones y viviendo del presupuesto público, como cualquier formación política, cambien de nuevo de rumbo y vuelvan a las andadas.

Estoy en la misma situación que se encontraban el resto de los mayorales en el famoso cuento del pastor mentiroso que siempre alertaba sobre la llegada del lobo, siendo mentira, y cuando realmente llegó, nadie le hizo caso y el cánido se comió a las ovejas.

Pienso que es sano y democrático que puedan presentarse a las elecciones para dar voz a todas las tendencias y que sería muy bueno que algún día llegara por fin la normalidad a Euzkadi, pero han sido demasiadas treguas trampa, demasiados incumplimientos y demasiadas falsedades, que cualquier actitud hace dudar a cualquiera.

Sin tenerlo claro al 100%, creo que ahora no hay ningún impedimento para que puedan presentarse legalmente a las elecciones de Mayo, pero, conociéndolos, bien haría la Justicia en tomar medidas, en el caso de que decidan dar la espalda otra vez a esta nueva oportunidad que se les ofrece, tendiéndoles la mano y permitiéndoles sentarse en las instituciones, y sólo sea otra nueva treta para seguir alimentando a la bestia y continuar destruyéndonos.

Lo ideal, bajo mi punto de vista, sería exigirles la entrega definitiva de las armas para que, de este modo, las buenas intenciones que manifiestan se tradujera en hechos concretos. Porque pensar que las mismas personas que han estado en la formación que apoyaba la violencia etarra, van a cambiar de postura porque lo digan, obligados por la premura de la presentación de candidaturas a unas elecciones, no es muy creíble. En el caso de que se presenten finalmente y resulten elegidos, sería también bueno que buena parte de sus emolumentos se destinaran al pago de las indemnizaciones a los cientos de víctimas que han dejado por el camino.

Igualmente será bueno analizar por qué el anuncio de Batasuna tiene una inmensa cobertura mediática y la manifestación del pasado sábado fue ninguneada por la mayoría de los medios.

De todos modos es un tema tan complejo que habrá que seguir profundizando para terminar de aclararnos.

Actualización: Según adelanta el diario Gara el nombre del nuevo partido será Sortu, cuyo significado es crecer, tal como informa el diario El Mundo.

La imagen la encontré en El Economista.