Alguna tarde que estoy desganado, aburrido o con ganas de divertirme, me voy a un supermercado a observar cómo se lo montan los bípedos de mi especie a la hora de procurarse el sustento cotidiano.
No suelo comprar cuando voy a pasar la tarde. Voy a mirar productos, precios, etiquetas y sobre todo a las estrellas indiscutibles, los compradores-as.
Lo primero que me llama la atención es la cantidad de venenos, grasa, colesteroles y basura que ingieren los seres humanos. Venenos, colesteroles, grasas y basuras de la que tendrán que deshacerse para mantenerse sanos. Una lista completa de todos estos mejunjes la encontré en Clinidiabet, una excelente guía para saber cómo manipulan los alimentos para que se parezcan a algo que nos gusta o que creemos que nos gusta o que la tele nos dice que nos debe gustar. Escoge la opción que quieras.
En mi última incursion hice un par de hallazgos muy interesantes:
Interior/Dia, Sección de congelados, apartado pizzas. Pizza que en letras grandes se anuncia con letras grandes como Pizza de Atún y al leer la etiqueta no lleva atún. Sólo incluye caballa.
Interior/Día, Sección de refrigerados, apartado quesos para pizzas. Sobres que se anuncian como mozzarella, supuestamente queso de leche de búfala, lees los ingredientes y contiene leche de vaca y otras cosas.
Aunque ahora la mozzarella ya se hace de leche de vaca, sería recomendable que lo digan claramente: Mozzarella de leche de vaca, para no inducir a engaño.
La sección de cosas mezcladas que dan como resultado algo así como agua coloreada con sabores y que en los supermercados suelen colocar en la sección de zumos, merecería un post aparte. Es sorprendente que productos tan extraños los compre la gente.
Caso aparte es la sección de productos lácteos, donde sueles encontrar un montón de productos químicos añadidos a un líquido blanco que suelen vender como leche. El resultado es un líquido de la textura del agua, pero de color blanco.
Observa algo muy curioso que ya comenté aquí en otra ocasión. La gente que lleva en su carro más colesterol, suele llevar leche desnatada o descremada, supongo que con la convicción que ese tipo de leche, supuestamente sin nata o grasa, neutralizará todo el colesterol que se metan en vena.
Por no hablar de los que llenan su carro de "leches" en las que anuncian que llevan calcio y vitaminas. La leche lleva ya calcio y vitaminas. No hace falta añadirle más. Es como si te vas a comprar un coche y eliges uno en el que anuncian que las ruedas o el motor están añadidos.
Muy curioso este fantástico mundo de los supermercados. También disfruto mucho en la sección de joyería o alta peleteria de los super, esto es, la sección de frutas y verduras. Con los precios que tienen, pronto van a tener que ubicarlos en cajas fuertes.
Las comidas preparadas, también merecerían todo un tratado. Son muy sugerentes las que tienen más de un párrafo en su lista de ingredientes.
Buscando imágenes para este post me encontré también un suavizante de marca Linux que lo comercializa una empresa llamada Micro&soft
Por cierto, en Roma, los responsables de administrar las monedas que los turistas arrojan a la Fontana de Trevi van a montar un supermercado para pobres, según lei en El Mundo.
Curiosamente esta misma noticia se la comuniqué a mis amigos italianos Renato y Tommaso que estando respectivamente en Roma y en Milán no la conocían. Incluso me dijeron que allí en Italia no había salido.
Espero que en ese supermercado para pobres, las familias necesitadas puedan divertirse tanto como yo me divierto en los supermercados, digamos, normales.
La imagen la encontré en el blog de Fabio Carmona.
1 comentario:
Sí que es todo un circo acudir a un supermercado. Yo que trabajé un tiempo con industrias de alimentación,es realmente sorprendente la manipulación a la que estamos sometidos.
Y lo peor es que no existe una manera de escaparse totalmente del espectáculo.
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