viernes, 13 de enero de 2006

Nuestros amigos los hackers

Vivir en el siglo XXI, es casi igual que vivir en el XX, no hay mucha diferencia. Pero conforme van cayendo los dígitos y cambias año a año el calendario, te vas dando cuenta que una nueva era ha llegado y que no tiene nada que ver con la anterior.

A lo largo de mi vida laboral creo que he vivido todas las contingencias de cierres, rescisiones de contrato, despidos, catástrofes de diversa índole y jefes más y menos competentes, pero ayer viví mi primera experiencia de no poder realizar mi labor en una empresa por hacking o para ser más exactos por cracking.

Deberían actualizar de una vez el Estatuto de los Trabajadores y admitir el hacking o cracking como fuerza mayor junto a catástrofes, modificaciones de las condiciones de trabajo etc.

La historia resumida vendría a ser la siguiente. Ahora mismo estoy trabajando en Radio Internet y en esa emisora a través de la Red emito mi programa diario de 120 minutos de duración de lunes a viernes. El sistema está muy bien para alguien como yo al que le encanta Internet y las nuevas posibilidades que nos ofrece. Grabo mi programa en mi casa poco antes de emitirlo, lo envío al servidor y el sistema lo emite automáticamente.

Pero, ayer, los hackers nos tenían preparada una sorpresita y, tras duros ataques consiguieron entrar en el sistema y mantuvieron la radio bajo mínimos durante alguna hora. Los técnicos contraatacaron y poco después se resolvió todo y apuntalaron nuevas murallas cortafuegos.

A mi no me afecto nada porque emití mi programa sin problemas, pero el servidor al servidor le costó algo más subir mi programa.

Esta experiencia me ha enseñado que hay gente aburrida, ociosa y malévola que circulan por ahí haciendo daño a diestro y siniestro por mera diversión. Desde luego yo no le veo la utilidad en hacerle la pascua a un sistema que mantiene una comunidad de blogs y una radio online.

Po otro lado me instalé un plugin para Firefox que evita el spyware. Dime tú a mi a quién le puede interesar saber qué tipo de páginas visito que es algo normalito: Unos cuantos blogs que me gustan, archivos de documentación musical, algunos diarios online, mis páginas para actualizarlas y poco más. ¿Por mi cuenta corriente puede ser? Humm. Estoy convencido que si un hacker accede a los datos de mi cuenta corriente y entra, seguro que le da pena y me hace un ingreso. Estoy por darlos a conocer.

Sobre el programa en sí escribiré un artículo(me niego ya a decir post) aparte, pero estoy gratamente sorprendido de la respuesta de la audiencia a través de Internet que, según noto, es mucho más participativa que la convencional. Pero para no alargarme, ya le dedicaré un espacio aparte.

La imagen la encontré en Slais. A pesar de todo lo que he leído sobre el tema, todavía no consigo averiguar la diferencia exacta entre hacker y cracker. Dependiendo de las fuentes a las que accedas, Hackers y Crackers son buenos y/o malos indistintamente. Personalmente creo que Hacker es alguien no especialmente dañino y Cracker es alguien no especialmente benigno. Los medios de comunicación, no obstante han resumido en la palabra Hacker los dos conceptos y creo que con esa idea se ha quedado el gran público.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios son bienvenidos en Crónicas de Esperantia. Se agradece y valora la participación y el intercambio de opiniones.

Sin embargo, no voy (puedo) a contestar a todos los comentarios de mis blogs. Muchas veces no veo como añadir valor con una contestación por mi parte, en otras pesa más mi intención de no repetirme o monopolizar la conversación.

Por favor, si esperas o deseas que conteste a uno de tus comentarios hazlo explícito con un "¿tu que opinas?" o similar.

El blog admite comentarios anónimos y sin moderación y con cualquier tipo de opinión, pero borraré lo antes posible todo aquel comentario ofensivo y soez.